os asentamientos que habían fracasado, entre ellos el de Cópala el cual se realizó presuntamente en la orilla de la Laguna de Mayran y las mercedes otorgadas a particulares, pasaron a poder del español Francisco de Urdiñola. Urdiñola estableció su casa, viñedos y bodegas y al lugar lo llamó la Misión de Santa María de las Parras. La hacienda por su parte, sería reconocida como hacienda de arriba, también como estancia de Urdiñola y después de la independencia de México como Hacienda del Rosario. Años más tardes hubo otra finca que al igual que la de Urdiñola comenzó a dar frutos, ésta se ubicaba hacia el norte a una legua de distancia, se llamaba Hacienda de abajo de San Lorenzo propiedad de Don Lorenzo García. Luego de varios años, el 18 de febrero de 1598 el capitán Antón Martín Zapata acompañado del padre jesuita Juan Agustín de Espinoza, ocuparon el territorio al que le dieron por nombre Villa de Santa María de las Parras. Un año después y por órdenes expresas del virrey Gaspar de Zúñiga y Acevedo, conde de Monterrey, se procede a trasladar hasta esas tierras a un grupo importante de indígenas tlaxcaltecas, que en ese entonces radicaban en Saltillo. Como testimonio de tal acontecimiento, la ciudad conserva una cruz que se encuentra en un sitio conocido como Cueva de Texcalco, lugar donde se creó la congregación indígena. Parras finalmente deja de pertenecer a la jurisdicción de la Nueva Vizcaya, por Cédula Rea del 21 de mayo de 1785, se agregó junto con Saltillo a la provincia de Coahuila, cuya capital en ese entonces era Monclova. Otro hecho que forma parte de la historia de Parras sucedió el 4 de julio de 1821, cuando las autoridades del lugar firman la Independencia de México y luego 25 años más tarde, el lugar es ocupado por las fuerzas de la intervención norteamericana al mando del general John Wool. Para 1866, las fuerzas mexicanas derrotan a los ejércitos franceses iniciándose así el triunfo de la República sobre el segundo imperio. A los dos años de este acontecimiento, la Villa de Parras fue elevada a la categoría de ciudad ostentando ahora el nombre de Parras de la Fuente, en honor al abogado saltillense Juan Antonio de la Fuente, defensor de los mexicanos en contra de los invasores franceses.
Gastronomía de Parras de la Fuente Pueblo Mágico En cuestión gastronómica, la ciudad de Parras recupera tradiciones indígenas y españolas para transformarlas en un delicioso banquete mestizo que incluye aperitivos exquisitos, tales como vinos generosos y licores de uva, seguidos por platillos esenciales como el asado de puerco, tamales de puerco y pollo o la deliciosa barbacoa, y de postre, los ricos dulces regionales. Artesanía en Parras de la Fuente Pueblo Mágico Para adquirir artesanías típicas sólo bastará con darse una vuelta por el centro histórico de la ciudad, donde encontrará objetos relacionados con la producción del vino, la actividad típica del lugar, además de muestras de vinos regionales que sin duda serán un buen obsequio para ocasiones especiales.
antuario de Nuestra Señora de Guadalupe. Obra de mediados del siglo XVI, que presenta una fachada sencilla en la que destaca la torre lateral de un cuerpo rematada por pináculos y cuatro imágenes en azulejo de la Virgen de Guadalupe que flanquean la entrada. Antiguo templo y Colegio de San Ignacio de Loyola. Erigido en el siglo XVII, también es un museo en el que se exponen algunas obras pictóricas de esta misma época. Archivo Matheo Alberga un importante conjunto de documentos eclesiásticos y civiles de los siglos XVII al XIX. Capilla del Santo Madero Construida entre 1868 y 1880, este sitio se ubica en la cima del cerro del Sombreretillo, lugar que recibió tal nombre debido a su parecido con el de un sombrero. Destaca por sus proporciones y su decoración sencillas. Palacio Municipal de Parras Presenta una fachada estilo neoclásico, de dos niveles, en los que se suceden grupos de balcones y ventanas, las cuales están rematadas con frontones triangulares. En el interior del edificio se encuentra un magnífico mural que resume los episodios más destacados de la historia del lugar.